El Óscar a la mejor película fue Birdman. Trata sobre la carrera de un actor y cómo esta se ha roto en pedazos. El actor echa de menos cuando interpretaba papeles con mucho éxito, como el de un superhéroe. Ahora desea volver a vivirlo de nuevo, subido en los grandes escenarios de Broadway, mientras intenta encontrarse a sí mismo, como persona, y también recuperar a su familia.
Y a la mejor película animada fue Big Hero 6. Trata sobre un adolescente llamado Hiro Hamada al que le encanta la robótica. El pobre, ha perdido a su hermano, Tadashi, al intentar destapar una peligrosa red criminal, de jefe el terrorífico Yokai. Para llenar su pérdida, se apoya en Baymax, un robot muy bueno creado por su hermano, que se convierte en su mejor amigo. Juntos, reúnen a los amigos de Tadashi y convertidos en superhéroes, forman un equipo muy poderoso para intentar derrotar al malvado villano que quiere destruir la tecnológica ciudad de San Fransokyo.
El premio a la mejor actriz lo ganó la intérprete estadunidenses Julianne Moore, con Siempre Alice. El premio al mejor actor fue Eddie Redmayne, con La teoría del todo.
Fue una gala muy bonita.
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